Por el Comité editorial de Panamá
Para honrar a las mujeres y apoyar la búsqueda de la equidad, el 8 de marzo el mundo conmemora el Día Internacional de la Mujer. Los desafíos que han debido atravesar y que aún hoy enfrentan las mujeres son muchos. Pero los cambios culturales, legislativos, educativos y científicos las acompañan en este camino a veces pedregoso, pero que vale la pena recorrer.
El 8 de marzo fue declarado el día de la mujer, para recordar a las mujeres que en ese día de 1908 murieron en un incendio luego de reclamar derechos laborales. Desde entonces, el género femenino intenta acortar la brecha salarial y laboral. Pretende volver a barajar los roles preestablecidos en el trabajo y la familia. También busca otorgarse tiempo para dedicarle a su profesión y a otros anhelos; entre ellos, la maternidad.
A este respecto, las opciones que ofrece la ciencia son de gran ayuda. La elección del tiempo y el modo de transitar la maternidad son herramientas poderosas que abren puertas. Las oportunidades se emparejan cuando las elecciones no están limitadas por los tiempos biológicos. Y en este aspecto, las opciones de reproducción asistida pueden hacer la diferencia.
Día de la mujer, ser madre y crecer en una profesión: todo un desafío
Las posibilidades de dedicarle tiempo al trabajo pueden verse reducidas cuando se planifica un embarazo. Una mujer puede verse confundida por sentimientos encontrados con respecto a los tiempos que podría dedicarle a un hijo y a su profesión. Los deseos de crecer laboralmente se pueden interponer con aquellos de transitar la maternidad, y viceversa.
Actualmente, las mujeres panameñas perciben un salario inferior al de los hombres en un 11%. Además, como detalla la Iniciativa de Paridad de Género de Panamá, tampoco se las promueve en sus cargos con tanta frecuencia. Y si bien están presentes en los mandos medios e inferiores, están casi ausentes en los superiores.
Muchas veces, los empleadores consideran que la posibilidad de ser madres les quita a ellas tiempo para dedicarle a la profesión. A su vez, las mismas mujeres dejan en repetidas ocasiones sus puestos de trabajo para abocarse a las tareas del hogar y a la maternidad, como reveló la Encuesta de Mercado Laboral de 2018.
A muchas, las licencias demasiado breves y el poco apoyo que pueden recibir de sus jefes y/o de sus parejas, no les dejan alternativa. Pero otras mujeres logran conciliar ambos mundos, algunas veces con ayuda de un tratamiento de reproducción asistida.
En el día de la mujer debes concoer que la edad, un factor cultural pero también biológico
Las chances de quedar embarazada y llevar a término una gestación que dé por resultado un bebé sano, se reducen con la edad. Las mujeres nacen con una cantidad de óvulos que va decreciendo, sobre todo a partir de los 32 años. Pero a los 35 es cuando hay baja considerable de aquellos, tanto cuantitativa como cualitativamente.
Por eso, una mujer que está creciendo profesionalmente debe a menudo elegir entre su trabajo y su deseo de tener hijos. Esto es, sin dudas, lo que aleja a muchas de ellas de los puestos jerárquicos y de salarios mejores. Sin embargo, la ciencia brinda opciones para aquellas que no quieren dejar pasar ninguna oportunidad.
Algunas de esas alternativas son:
Mediante esta técnica, los ovocitos son extraídos mediante estimulación ovárica, y criopreservados para su posterior uso. Este método brinda mejores tasas de supervivencia de los óvulos que el congelamiento tradicional, ya que no se forman cristales de hielo que alteren su calidad. Incluso, no tienen fecha de “caducidad”, ya que esta técnica permite una preservación en tiempo ilimitado.
Una vez que la mujer decide ser madre, puede usar sus óvulos criopreservados o los extraídos en ese momento. Aún si la mujer no los conservó y no logra quedar embarazada, puede recurrir a esta técnica de fecundación in vitro. Esto resulta conveniente para reducir las chances de abortos espontáneos, algo que sucede más a menudo cuanta más edad se tiene.
Debido a que los preembriones son generados en laboratorio, se los puede analizar antes de implantarlos en el útero materno. Al elegir el preembrión más sano para implantar, se reducen los riesgos asociados a la edad, como el de tener un bebé con enfermedades cromosómicas.
Es importante destacar, además, que este análisis realizado en pacientes de edad materna avanzada, mejoró en un 40% la tasa de embarazo acumulada en los centros IVI.
En IVI Panamá tenemos un equipo de profesionales comprometidos en brindar un servicio seguro y de calidad. Además, estamos respaldados por múltiples premios en congresos mundiales, y avalados por 1900 publicaciones científicas. Y las tasas de éxito también nos acompañan: el 90% de nuestros pacientes logran un embarazo.
Por eso, ante el avance de los años, no hay que desesperarse. No hace falta tomar decisiones apresuradas cuando se tienen dos deseos que parecen incompatibles. Fortalecer una carrera profesional y ser madre, pueden ser dos objetivos cumplidos gracias a técnicas de avanzada. Las mujeres, así, pueden brindarse ese tiempo que necesitan para fortalecer su carrera profesional y cumplir otras metas antes de ser madre.
Y esto, sin dudas, es otro aporte valioso a la equidad que busca este Día Internacional de la Mujer.
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