La Inyección Intracitoplasmática (ICSI) es una técnica de reproducción asistida incluida en el tratamiento de FIV que ha permitido conseguir con éxito el embarazo en las parejas diagnosticadas de un factor masculino severo.
La Inyección Intracitoplasmática (ICSI) es una técnica de reproducción asistida incluida en el tratamiento de FIV que ha permitido conseguir con éxito el embarazo en las parejas diagnosticadas de un factor masculino severo. El varón deberá proporcionar una muestra de semen o realizarse una biopsia testicular- en caso necesario-, para extraer y seleccionar los mejores espermatozoides que serán utilizados para la fecundación de los ovocitos.
Esta técnica se realiza en casos de infertilidad masculina severa como la azoospermia y criptozoospermia. Luego de recoger la muestra de semen o biopsia testicular se realiza el estudio en el laboratorio de andrología, en el que se analizan aspectos de los espermatozoides como su calidad y cantidad, así como la morfología y movilidad. En el laboratorio de fecundación in vitro (FIV), se escoge el mejor espermatozoide y se introduce en el interior de una pipeta de microinyección para posteriormente, mientras se sujeta el óvulo, por una parte, inyectar la pipeta por el lado opuesto e introducir el espermatozoide en el interior del citoplasma del óvulo.
RESULTADOS
El 90% de los pacientes que siguen un tratamiento de reproducción en IVI quedan embarazados.
ATENCIÓN
El 97% de nuestros pacientes recomiendan IVI.
IVI ofrece atención personalizada y acompañamiento en todas las fases del tratamiento.
TECNOLOGÍA
IVI es pionero gracias a que usa la última tecnología de reproducción asistida para ofrecer los mejores resultados.
CALIDAD-PRECIO
No somos la opción más cara. Somos la que más alternativas de tratamiento ofrecemos para lograr resultados.
La Inyección Intracitoplasmática permite la unión directa del óvulo y del espermatozoide facilitando la fecundación. Un espermatozoide con baja movilidad o mala morfología tendría mayor dificultad para conseguirlo de forma natural o mediante la técnica de FIV clásica.
Evaluación personalizada del paciente para determinar el tratamiento de fertilidad más adecuado.
La estimulación ovárica controlada en la fecundación in vitro (FIV) consiste en la administración de unas inyecciones diarias que conseguirán estimular los folículos ováricos de la mujer y así producir mayor cantidad de óvulos en vez de producir un único óvulo- que es lo que hacen de forma espontánea y natural cada mes-, para poder llegar a obtener un mayor número de embriones. El tratamiento se realiza en la clínica de reproducción IVI Panamá y dura entre 10 y 20 días, en función del protocolo utilizado y la velocidad de respuesta de cada paciente. Durante el mismo, se realizan ecografías seriadas (unas 3 o 4) y se determina el estradiol en sangre para comprobar que el crecimiento y la evolución de los folículos es el adecuado.
Cuando se comprueba por medio de ecografía que los folículos se han desarrollado, alcanzado el tamaño adecuado y se considera que ya hay disponibles un número adecuado de óvulos, se programa la punción folicular alrededor de 36 horas después de la administración de una inyección de hormona hCG que induce la maduración ovocitaria de forma similar a como tiene lugar en el ciclo natural. La punción se realiza en quirófano y bajo sedación, con el fin de que la paciente no sienta ningún tipo de molestia durante el procedimiento, cuya duración es de 15 minutos aproximadamente. Luego de extraer el líquido folicular donde vienen los ovocitos de la paciente, estos son enviados inmediatamente al laboratorio de fecundación in vitro, donde el especialista realizará la limpieza y adecuación de los óvulos para así proceder con el espermatozoide apto de la pareja o del donante a realizar la inyección intracitoplasmática o ICSI.
Una vez disponemos de los óvulos tras la realización de la punción folicular y se han seleccionado los espermatozoides de mejor movilidad y morfología, se procederá a la microinyección de los óvulos. Durante el proceso en el que se realizará la ICSI, se coloca el espermatozoide seleccionado dentro de una minúscula pipeta y es inyectado directamente dentro del óvulo. De esta manera, facilitamos al máximo la fecundación y los embriones obtenidos se desarrollarán durante 3 a 5 días en el Laboratorio, antes de ser transferido nuevamente al útero materno.
Los embriones resultantes tras la fecundación de los óvulos son observados en el laboratorio día tras día hasta llegar al día 5, cuando alcanzan el estadio de blastocisto. Los embriones que llegan a este estadio con buena morfología tienen altas probabilidades de implantarse tras la transferencia al útero de la mujer. Todo este desarrollo ocurre en una incubadora, siempre evitando su manipulación y conservando una temperatura de 37º C. Además son importantes otros factores como la humedad y la concentración de dióxido de carbono y oxígeno. Los embriones son clasificados según su morfología y capacidad de división, ya que algunos pueden llegar a bloquearse en su desarrollo. Estos serán descartados al ser considerados no viables.
El transfer consiste en la introducción del embrión más apto dentro del útero materno con la ayuda de una cánula especialmente diseñada para ello. Previamente, se habrá preparado el endometrio de la paciente para así favorecer que el embrión se implante correctamente. La transferencia se lleva a cabo en el quirófano con la ayuda de un ecógrafo, ya que esto ayuda a colocar el embrión en el fondo del útero. No es preciso realizar sedación, ya que es un proceso rápido e indoloro. Luego de la transferencia la paciente se queda acostada por 30 a 40 minutos y, ya transcurrido ese tiempo, se puede ir y hacer su vida normal, si bien se le darán algunas recomendaciones, como no levantar peso.
Una vez realizada la transferencia embrionaria, se lleva a cabo la vitrificación de los embriones de buena calidad no transferidos, con el fin de que puedan ser utilizados en un ciclo posterior cuando la mujer planifique tener otro hijo sin necesidad de estimulación ovárica. Gracias a la ultracongelación rápida con la técnica CRYOTOP, sus estructuras celulares no se ven perjudicadas, y al ser desvitrificados siguen su desarrollo y división de forma normal.