Por el Comité editorial de Panamá
El hipogonadismo se da cuando el cuerpo no produce suficientes hormonas sexuales. Las glándulas sexuales, también llamadas gónadas, están conformadas por los ovarios y los testículos. En ese sentido, las opciones para tratar dicha afección dependerán, en gran medida, de si se está tratando de concebir.
Las hormonas sexuales son muy importantes, porque ayudan a controlar características sexuales secundarias. Por ejemplo, el desarrollo mamario, el ciclo menstrual, el crecimiento del vello púbico y el desarrollo testicular. En ese sentido, tanto el hipogonadismo femenino como el masculino suelen tener más de una causa y se puede manifestar de distintas formas.
En esta nota aprenderás cuáles son los tipos de hipogonadismo, así como las causas y los síntomas de esta enfermedad. También conocerás las opciones de tratamiento disponibles en caso de que estés buscando tener un bebé.
Hipogonadismo femenino
En las personas asignadas como mujeres al nacer, las gónadas están representadas por los ovarios. Gracias a estas será posible tener un ciclo menstrual, vello público y el desarrollo de las mamas.
Las causas del hipogonadismo femenino se pueden determinar según:
- Hipogonadismo primario: esto puede venir de los ovarios. En ciertos casos, las mujeres sufren un trastorno genético conocido como Síndrome de Turner. Es poco común y ocurre cuando la mujer no tiene el par normal de cromosomas X. Ciertos trastornos genéticos y del desarrollo, así como infecciones y traumatismo también lo ocasionan.
- Hipogonadismo secundario: este ocurre cuando las áreas del cerebro encargados de controlar las gónadas –es decir, el hipotálamo y la hipófisis– no funcionan como deberían. Esto se puede deber a ciertos medicamentos, infecciones, deficiencias nutricionales, traumatismo e incluso anorexia nerviosa.
Es importante mencionar que algunos factores de riesgo en esta enfermedad incluyen las quimioterapias previas, el envejecimiento, la obesidad y una mala nutrición. El hipogonadismo puede ser hereditario, así que si se encuentra en tu historial de salud, debes comunicarlo a tu médico.
Detectarlo a tiempo puede ser crucial al momento de iniciar un tratamiento. Los síntomas del hipogonadismo femenino incluyen:
- Ausencia de menstruación.
- Crecimiento lento o ausente de las mamas.
- Secreción lechosa de los senos.
- Pérdida de vello corporal.
- Escaso o nulo deseo sexual.
- Infertilidad.
En el caso de las mujeres con hipogonadismo, es importante acudir a valoración médica para determinar las causas y el tratamiento a seguir. Esto es especialmente importante cuando se desea concebir, pues muchas de las funciones del organismo dependen de la producción de hormonas sexuales femeninas.
Hipogonadismo masculino
El hipogonadismo masculino se caracteriza por la incapacidad del cuerpo para producir una cantidad suficiente de testosterona. Esta hormona sexual masculina es clave para el crecimiento y desarrollo masculino, especialmente durante la pubertad. Además, es la encargada de la producción del esperma.
Esta condición médica puede ser de nacimiento o desarrollarse más tarde en la vida. Usualmente viene de lesiones o infecciones y sus efectos dependerán del momento de la vida en que se produzca el hipogonadismo masculino.
La buena noticia es que el hipogonadismo en el hombre se puede tratar de la mano de los profesionales de la salud por medio de una terapia de sustitución de testosterona. Existen dos tipos básicos de hipogonadismo:
- Hipogonadismo primario: también conocido como “insuficiencia testicular primaria”, se trata de una condición originada por un problema en los testículos que impide la producción de testosterona. Algunos hombres tienen esta enfermedad debido al Síndrome de Klinefelter, el cual ocurre cuando tienen un cromosoma X extra.
- Hipogonadismo secundario: Este viene del hipotálamo o de la hipófisis, áreas en el cerebro encargadas de dar la señal a los testículos de producir testosterona.
En cualquiera de los casos, podemos estar hablando de rasgos congénitos o de rasgos adquiridos –si la condición se da en otro momento de la vida–. Una lesión o infección en los testículos pueden dar origen a cualquiera de los dos tipos de hipogonadismo. Aunque en ocasiones, estos aparecen juntos.
Los síntomas del hipogonadismo masculino incluyen:
- Crecimiento anormal de las mamas.
- Crecimiento reducido del pene y de los testículos.
- Pérdida de masa muscular.
- Disfunción eréctil.
- Pérdida de vello corporal.
- Escaso o nulo deseo sexual.
- Dificultad para concentrarse.
Es importante que un profesional de la salud valore si el paciente vive con hipogonadismo. Cuando esta enfermedad no se trata, puede dar lugar a complicaciones, las cuales pueden ir desde genitales anormales, problemas de infertilidad hasta afectaciones psicológicas.
Afortunadamente, existen distintos tratamientos que ayudan a tratar esta enfermedad, tanto en hombres como en mujeres.
Hipogonadismo: tratamiento
El hipogonadismo requiere tratamiento médico, tanto en el caso femenino como masculino. Para diagnosticarlo se requiere un análisis de sangre donde se analicen los niveles de la Hormona Folículo Estimulante (FSH) y de la Hormona Luteinizante (HL). La hipófisis es la encargada de producir estas hormonas reproductivas, también llamadas gonadotropinas.
En el caso de las mujeres, es necesario realizar análisis de los niveles de estrógenos. El médico también puede solicitar un recuento de los óvulos por medio de una prueba de Hormona Antimulleriana (HAM).
Por otro lado, para los hombres se requiere medir los niveles de testosterona. Estas usualmente se realizan por la mañana cuando los niveles hormonales son más altos. También se puede realizar un análisis de semen para verificar el recuento de espermatozoides.
En ambos casos, el tratamiento para el hipogonadismo se realiza mediante medicamentos, cirugía y radiación, en caso de requerirlo. Sin embargo, pueden tener ciertas diferencias:
- Tratamiento para el hipogonadismo femenino. Consiste en aumentar la cantidad de hormonas sexuales femeninas. Si estás buscando formar una familia, se puede recurrir a la donación de óvulos en una clínica de reproducción asistida. En otros casos es posible recibir inyecciones de FSH.
- Tratamiento para el hipogonadismo masculino. En este caso, se pueden administrar inyecciones de la hormona Liberadora de Gonadotropina (GnRH) para aumentar la producción de esperma si se está buscando tener un bebé. También es posible recibir una terapia de reemplazo de testosterona mediante inyecciones, parches o pastillas.
Gran parte de los casos de hipogonadismo responden exitosamente al tratamiento, haciendo que miles de personas logren concebir. Acércate a nuestros expertos de IVI Panamá para que te orienten acerca de esta y otras alternativas de reproducción asistida.
Además, contamos con profesionales en salud mental que te acompañarán a lo largo del proceso. De este modo, recibirás un tratamiento completo frente al hipogonadismo que te permitirá cumplir tu sueño de tener un bebé. ¡No dudes en contactarlos!
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